Allá por la década de 1980, las estaciones de televisión BBC y PBS transmitieron una serie de documentales con ese título, dedicado a explicar cómo los descubrimientos científicos y avances tecnológicos críticos cambiaron fundamentalmente la forma en que entendemos el mundo.
Hoy la Corte Suprema de los Estados Unidos le causó un cambio al universo del lugar de trabajo en ese país. La Corte emitió una decisión por mucho tiempo esperada que seguramente tendrá efectos secundarios en muchas normas legales que datan de hace años y a las que ya nos habíamos acostumbrado.
Especialmente, la Corte dejó sin efecto un caso de cuarenta años de antigüedad llamado Chevron U.S.A. Inc. contra National Resources Defense Council, Inc. Ese caso de 1984 fue el origen de la doctrina jurídica conocida como “deferencia al caso de Chevron” – que es (o, mejor dicho ahora , fue) lo que llevó a los tribunales a deferir a las interpretaciones de la ley federal hechas por agencias federales encargadas de la administración y aplicación de las leyes federales, o sea, agencias federales como la Comisión de Igualdad de Oportunidades en el Empleo (“EEOC” por “Equal Employment Opportunity Commission”), el Departamento del Trabajo (“DOL” por “Department of Labor”) y la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional (“OSHA” por “Occupational Safety and Health Administration”). Gran parte del trabajo de estas agencias federales y otras tiene que ver con determinaciones tomadas por funcionarios de las mismas que presumiblemente tienen especial experiencia en el campo de la misión de la agencia.